La Princesa Monoke
La Princesa Mononoke
La princesa Mononoke es una película de animación japonesa escrita y dirigida por Hayao Miyazaki, estrenada en 1997.
Fue producida por Studio Ghibli y distribuida por Tōhō. La princesa Mononoke fue el undécimo largometraje de Studio Ghibli y el sexto dirigido por Miyazaki.
Ambientada en un Japón del período Muromachi, se centra en la lucha entre los guardianes sobrenaturales de un bosque y los humanos que profanan sus recursos.
En realidad, Mononoke no es un nombre, sino una descripción que puede ser traducida en este contexto como espíritu vengador por lo que el título de la película literalmente podría traducirse como La princesa de los espíritus vengadores.
El Espíritu del Bosque
La Princesa Mononoke de 1997 es una película dirigida por Hayao Miyazaki del estudio Ghibli y es una de las obras de animación japonesa que más me han gustado. Me encanta la ambientación medieval (esta en concreto trata el periodo Muromachi japonés de entre los siglos XIV y XVI). También la dualidad de sus personajes y la lucha entre la naturaleza y los deseos de los humanos por controlarla.
La princesa Mononoke cuenta la historia de Ashitaka, un joven príncipe que por salvar a su aldea de un jabalí infecto por una extraña maldición (“cuando un espíritu es alcanzado por una bala humana se corrompe”) queda contagiado por ésta y tiene que adentrarse en el bosque para encontrar a un espíritu que pueda curarle.
Ashitaka en «La Princesa Mononoke»
En su viaje se encuentra con dos personajes femeninos importantes:
San, la Princesa Mononoke, es una chica criada por lobos (no como el de Herman Hesse) y comprometida con la defensa del bosque por encima de todo, en este caso en su lucha contra los Tatara. Su dualidad reside en que al conocer a Ashitaka, entiende su bondad y se posiciona a su favor tratando de defenderle de los suyos cuando su vida corre peligro.
San, la Princesa Mononoke
Por otro lado, Lady Eboshi es la mujer que lidera a los humanos de la tribu Tatara quienes explotan los recursos naturales, extraen hierro y talan el bosque para expandir su poder y así crear armas de fuego.
En su defensa, es una gran líder y una férrea defensora de los problemas que tiene su sociedad. Ha comprado a todas las mujeres de los burdeles de otras ciudades, les ha provisto de trabajo y también cuida de enfermos de lepra que son repudiados en otras partes.
Lady Eboshi, líder de la tribu Tatara
Ashitaka ve el deseo de hacer el bien de ambas mujeres y esto le crea enemigos en ambos mundos.
¿Por quién decidirá luchar en la última batalla?
La película está llena de curiosidades y fue una de las últimas de su estudio que fue íntegramente dibujada a mano (a excepción de unos 10 minutos de metraje que hicieron digitalmente por llegar a los tiempos de producción). Todos ellos supervisados y dibujados previamente por Hayao Miyazaki a modo de storyboard. También redibujó y corrigió él mismo alrededor de 80.000 de las imágenes que aparecen en pantalla.
Harvey Weinstein compró los derechos para distribuirla en Estados Unidos y pidió a Hayao Miyazaki que hiciera cortes para adaptarla al formato de tiempo funcional americano de una hora y media. Miyazaki le envió como respuesta una katana con una inscripción: “NO CUTS” y la película se estrenó en su longitud completa, a lo que declaró: “Le he vencido”.
Ilustración de la Katana enviada por Hayao Miyazaki a Harvew Weinstein
Al ser una película de animación, se daba por sentado que era una película para niños.
En ella podemos ver brazos amputados, sangre, leprosos y cabezas volando. Cuando las madres del mundo se quejaron por lo explícito de esta violencia, Hayao Miyazaki dio unas declaraciones en las que decía:
“Hay que abordar los temas que tratamos de la forma más honesta posible. No considerar, en particular, el pasado como algo intocable confinado en los museos. Hay que narrar el mundo tal y como lo sentimos, tal y como lo vivimos. Para mí todo eso no es tan grave ya que no me quedan muchos años por delante… Pero muchos jóvenes son descendientes de una generación cuyos padres los han llevado literalmente en brazos. Están completamente debilitados. Cincuenta años después de la guerra, hemos vuelto ingenuamente al punto de partida. Pensamos que eludiendo las cosas desagradables podemos hacernos mejores, que superando la pobreza estaremos sanos. Sin embargo, ahora sabemos que no hacemos más que crearnos nuevas plagas«.
Hayao Miyazaki a sus 80 años
La temática del medio ambiente y el hombre enfrentado con la naturaleza han sido géneros abordados tanto en la animación japonesa como en otros estilos cinematográficos pero, hasta entonces, se había tratado a lo natural como un ser pasivo, sometido por el hombre y sin posibilidades de rebelión activa, intentando concienciar al espectador de su cuidado más que creando un miedo ante su verdadero poder de destrucción.
Más adelante hemos visto otras en las que la naturaleza se rebela activamente (El Día de Mañana, Annihilation o Lo Imposible) y si nos fijamos en cómo está el planeta en pleno siglo XXI parece que el espíritu del bosque ha despertado y que vamos a tener que librar una batalla que no creo que podamos ganar.
Habitantes del bosque en «La Princesa Mononoke»
El calentamiento global, la destrucción de los bosques o el deshielo son hechos que parece que no quieren ser evitados por aquellos que obtienen beneficios económicos de ellos y los desastres naturales son cada vez más frecuentes y agresivos. Somos hijos del planeta y nuestra madre está enfadada.
Llevamos mucho tiempo siendo un virus para la tierra, extrayendo sin piedad sus riquezas y solo devolviendo desechos y contaminación, y estamos en un momento interesante, en el que hemos caído en la cuenta de que estamos causando catástrofes naturales que están muy fuera de nuestro control.
La princesa Mononoke es una película de animación japonesa escrita y dirigida por Hayao Miyazaki, estrenada en 1997.
Fue producida por Studio Ghibli y distribuida por Tōhō. La princesa Mononoke fue el undécimo largometraje de Studio Ghibli y el sexto dirigido por Miyazaki.
Ambientada en un Japón del período Muromachi, se centra en la lucha entre los guardianes sobrenaturales de un bosque y los humanos que profanan sus recursos.
En realidad, Mononoke no es un nombre, sino una descripción que puede ser traducida en este contexto como espíritu vengador por lo que el título de la película literalmente podría traducirse como La princesa de los espíritus vengadores.
