Los Thibault
Nacido en una familia acomodada, de abogados y magistrados, su situación le permitió dedicarse a la literatura. Estudió en el Lycée Janson de Sailly de París.
De vocación literaria precoz, fue consciente de ella tras leer Guerra y paz de León Tolstói.
En 1908 publica su primera novela Devenir. Tras la publicación en 1913 de Jean Barois, en la que Martin du Gard aborda el caso Dreyfus le permite trabar amistad con André Gide y Jacques Copeau.
Participó como soldado en la Primera Guerra Mundial. Cuando esta terminó, empieza la redacción de la que será su obra magna: la saga de Los Thibault.
Recibe el Premio Nobel de Literatura en 1937. A partir de ese momento su obra deja de ser considerada relevante por parte de la crítica, hasta el momento en el que Albert Camus la vuelve a reivindicar.
La Primera Guerra Mundial
Estamos asistiendo estos días a la invasión de Ucrania por Rusia. Millones de personas abandonan a sus seres queridos, hogares y enseres para refugiarse en otros países de Europa, huyendo de los bombardeos y de la devastación que éstos ocasionan en sus ciudades y pueblos. Otros, en su gran mayoría hombres, se quedan para luchar por su país y hacer frente a la invasión.
Este conflicto me ha traído a la memoria un libro que leí en 2018: “Los Thibault”, de Roger Martin du Gard.
Fotografía de trincheras en la Primera Guerra Mundial
La novela, integrada por seis volúmenes, está ambientada en el París de principios del siglo XX y en los años que precedieron a la Primera Guerra Mundial. Nos narra la vida de los hermanos Antoine y Jacques Thibault, nacidos en el seno de una próspera familia francesa, muy tradicional y católica; huérfanos de madre a temprana edad, y criados por su déspota e intransigente padre, Oscar Marie Thibault, y por la Srta. Waize.
Antoine y Jacques son muy diferentes. El primero es un joven burgués, conservador, centrado en mejorar su futuro profesional como médico. El segundo es un adolescente rebelde e inquieto, con inclinaciones literarias, que pone en tela de juicio el sistema social y político en el que le ha tocado vivir. A través de ellos abordaremos temas como la política, la religión, el amor, la amistad, la educación…; conoceremos con detalle la sociedad de la época y los esfuerzos de muchos para evitar la Primera Guerra Mundial (28/7/1914 a 11/11/2018), y la participación, finalmente, de Francia y de ambos hermanos en ella.
Soldados heridos volviendo del frente en la Primera Guerra Mundial
Es uno de los libros más duros y mejores que he leído, porque en él no nos narran los hechos, como otros, desde el punto de vista de la lucha entre el bien y el mal, de los maravillosos vencedores y de los malvados vencidos, sino de los peligros que entrañan los nacionalismos, de cómo algunos se valen del poder de los medios de comunicación para convencernos de la legitimidad y necesidad de participar en un conflicto -que no deseamos-, y de cómo determinados acontecimientos pueden abocarnos a ello. Hechos todos ellos que se dan también en la actualidad.
En este relato no hay vencedores ni vencidos, sólo víctimas, muchísimas víctimas: se estima que en la Primera Guerra Mundial murieron unos siete millones de civiles y unos diez millones de soldados. Destrucción de infraestructuras, tales como viviendas, vías terrestres, puertos, industrias…. Y sufrimiento: discapacidad de muchos hombres, ocasionada por las heridas recibidas en los combates, e infinidad de viudas y huérfanos. Todo ello contribuyó a un aumento de la brecha social entre pobres y ricos.
Roger Martin du Gard (23/3/1881 – 22/8/1958). Participó como soldado en la Primera Guerra Mundial y obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1937.
Dos médicos atienden heridos en la Primera Guerra Mundial